Conocida antiguamente como Santa Maria de Gausac o Santa Maria del bosque, debido a que en su interior se veneraba esta imagen. El topónimo de Gausac ya lo encontramos documentado a finales del siglo X. A pesar de todo, no encontramos ninguna referencia concreta al templo hasta el año 1120, en que aparece en la relación de bienes dell Monasterio de Sant Cugat del Vallès, confirmada por el papa Calixto II. Llegó a tener condición de parroquia, que perdió en el siglo XVI, cuando pasó a estar dedicada a Santo Adjutori.

Fue a partir del siglo XIII que empezó a ser conocida con el nombre de Santa Maria del Bosque. Actualmente la talla de la Virgen se conserva en el monasterio. Según la tradición la imagen fue encontrada por unos pastores, que vieron que cada día los bueyes se arrodillaban en un lugar. En el siglo XIX la imagen fue trasladada a la masía de can Jané, junto con la de sant Adjutori debido al estado de ruina en que se encontraba el templo,al estar abandonado desde 1835 cuando se desamortizó el monasterio. Tras la Guerra Civil fue devuelta a la parroquia por la familia Jané y cuando estuvo restaurada fue entronizada el 8 de septiembre de 1940.

Se trata de una talla de madera policromada del siglo XIII. En ella se representa a la Virgen sentada, con el Niño en el regazo, ligeramente desplazado hacia la izquierda, haciéndole de trono. El Niño nos bendice con la mano derecha, mientras que con la otra sostiene una bola, símbolo de todo el mundo creado.

La iglesia es una de las pocas de nuestro país construidas con planta circular, sin ábside y cubierta con una bóveda semiesférica.

El interior se iluminaba gracias a tres ventanas abocinadas y de medio punto.

También encontramos dos ventanas circulares, situadas por debajo de las anteriores. Los círculos son realizados con dovelas bastante bien talladas.

La puerta de acceso estaba situada en el lado de poniente, si bien no nos ha llegado. Antes de las obras de restauración en este sector había un gran agujero, que no parece corresponder con las dimensiones habituales de las puertas en este tipo de templos.

Este gran agujero se practicó entre los siglos XVI y XVII cuando se remodeló el templo, construyendo una nave y convirtiendo el templo románico en el brazo norte del crucero del nuevo edificio. De estas reformas sólo quedan en pie unos centímetros de los muros perimetrales, que dibujan su planta. 

Por la tipología de los diferentes aparatos que se encuentran en sus muros, se cree que el templo fue construido aprovechando alguna estructura militar anterior. La torre circular se debería edificar en el siglo X y posteriormente a finales del siglo XI o principios del XII, se reformó el edificio y se abrieron las diferentes ventanas.  

Cerca del templo podemos observar un antiguo horno. Durante muchos años se ha polemizado sobre el origen de estos restos, que durante muchos años se han considerado de época ibera. Las últimas informaciones apuntan a que fue construido en época romana, si bien se han encontrado numerosos elementos iberos a su alrededor y probablemente ya existía otro horno, este si ibero, por la zona.