A finales del siglo X encontramos documentadas dos torres en el término de Sant Just Desvern: la de Foret y la de Mazone . Por las descripciones de la ubicación de esta última, está claro que no puede ser la torre del Moro. No está claro, en cambio, si correspondería con la torre de Foret, pues se desconoce el lugar exacto dónde ésta se levantaba. La primera noticia documentada a ciencia cierta data del 1050, cuando se habla del castrum, que había sobre la parroquia de Sant Just.

El lugar dónde se levantaba la torre ya había sido habitado por los íberos hacia al siglo VI a.C, por que al estar situado en una peña, a 275 metros de altitud, permitía el control de la llanura del Llobregat, en aquellos momentos navegable.

Sobre la antigua torre defensiva de los íberos, que tenía planta cuadrada, se levantó en época medieval una torre de planta circular, con un diámetro interior de casi cuatro metros.

Durante las campañas de excavación llevadas a cabo entre los años 1972 y 1990 se descubrieron varias edificaciones, que en la campaña arqueológica del año 2001 se restauraron y consolidaron. Podemos ver el perímetro de algunas estancias adosadas por el este y por el sur a la torre circular.

Cerca de la torre se pueden ver grandes bloques de piedra, que formaban parte de la fortificación Su existencia hacen pensar que la fortaleza fue dinamitada.