Provincia de Barcelona


Sant Martí del Brull
(El Brull, Osona)

41º 48,985'N ; 2º 18,335'E     




A los pies de la montaña dónde se levantaba el castillo del Brull, encontramos este templo edificado durante la segunda mitad del siglo XI.  Originariamente se encontraba dentro del término de Seva, bajo el control de los vizcondes de Osona y Cardona, señores del castillo, pero posteriormente pasó a depender del obispado de Vic.


Las primeras noticias datan del año 1018, si bien el templo que podemos contemplar en la actualidad se construyó entre los años 1048 y 1060. Fue consagrada por el obispo de Vic, Guillem de Balsareny. Inicialmente se consagraron tres altares dedicados a San Martín, San Miguel y San Juan. En el siglo XIV se añadió otro altar dedicado a Santa María.


Entre los siglos XVI y XVIII se realizaron numerosas modificaciones en el templo. Las más importantes se realizaron en la cabecera, donde se eliminaron las absidiolas laterales, y en el sector oeste, donde se modificó la puerta de acceso y se construyó una torre campanario.   


El templo ha sufrido numerosas reformas, especialmente en su interior, pero todavía mantiene visible su estructura románica. Está formada por una sola nave rematada al este por un ábside semicircular. Inicialmente tenía cabecera en forma de trébol, pero los dos ábsides laterales fueron demolidos y sustituidos por dos capillas cuadradas.


El ábside principal está decorado externamente según los cánones lombardos con arcos ciegos, que enmarcan unas ventanas ciegas, agrupados de tres en tres mediante  lesenas.


La parte interior del ábside está decorada con cinco nichos semicirculares, separados por semicolumnas. En tres de ellos se abren ventanas de medio punto abocinadas.

La iluminación del templo se completaba con tres ventanas, abiertas en la parte alta de los muros laterales norte y sur.


La puerta de acceso actual se encuentra en el muro oeste. Esta se construyó en época barroca. La original se abría en el muro sur y estaba protegida por un atrio, del que sólo se conservan los pilares y los arcos dónde se apoyaba el tejado.


En la fachada oeste, a pesar de ser reformada en el siglo XVIII, todavía se pueden ver las lesenas que la decoraban. Desgraciadamente, al sobrealzar el muro, se eliminaron los arcos ciegos, que completaban la decoración lombarda.


Si que se conservan los dos elementos en los muros laterales del templo.

Decoración del muro sur     Decoración del muro norte

En el Museu Episcopal de Vic se conservan las pinturas murales al fresco, datadas al principios del siglo XII, que decoraban el ábside y que fueron arrancadas el año 1935.


Desgraciadamente sólo se han conservado dos registros de imágenes, de todas las que recubrían el ábside. Corresponden a la parte superior de las hornacinas y al arranque de la bóbeda absidal y representan el Génesis y escenas de la infancia de Jesús.

En la hornacina situada más a la izquierda podemos ver a Adán y Eva junto al Creador. En el siguiente espacio vemos como los dos comen la fruta prohibida. En el recinto central observamos los efectos del pecado original. Dios, en la parte central de la imagen, recrimina a Adán su falta, mientras que Eva queda en un segundo plano.

Adán y Eva junto al Creador   Pecado original   Dios recrimina a Adán

Esto hace que en la siguiente imagen vemos como son expulsos del Paraíso por Dios. Completa el ciclo una escena donde Adán y Eva están trabajando la tierra para poder sobrevivir.

Adán y Eva son expulsados del Paraiso   Adán y Eva han de trabajar

En el friso superior  se representaron escenas del ciclo de la Redención. En el lado izquierdo se conserva la escena de la Natividad. A su lado encontramos la Anunciación a los pastores, la Epifanía y la presentación en el templo. Las trazas y algunos detalles hacen que algunos estudiosos emparenten estas pinturas con las de San Julián y Santa Basilisa de Bagüés, en Aragón.

Natividad   Anunciación a los pastores

Epifanía   Presentación en el templo


en la bóveda absidal se representó una Maiestas Domine, rodeada por las imágenes del Tetramorfos, de los que sólo se han conservado algunos pequeños fragmentos.


En el museo también se conservan,  procedentes de este templo, dos candelabros de hierro forjado del siglo XII y una tapa de un libro hispanoárabe.

Candelario conservado en el MEV   Candelario conservado en el MEV