Aragón - Provincia de Huesca


San Pedro de Arbués
(Bailo, La Jacetania)
42º 30,419'N ; 0º 47,057'O      




En un documento procedente del monasterio de San Juan de la Peña del año 1004, encontramos la primera referencia escrita de este templo.


La iglesia era originalmente románica, pero fue profundamente modificada entre los siglos XVII y XVIII. En estas reformas se cambió la orientación del templo y se añadieron capillas a modo de naves laterales. En el muro oeste se pueden observar claramente las diferentes etapas constructivas.


Por suerte, se reaprovecharon muchos elementos del anterior templo románico, el más destacado de los cuales es la portada, situada en el muro sur.


Al construir las capillas laterales, se derruyeron los muros norte y sur, aprovechando sus sillares para la construcción de los nuevos. Lo mismo ocurrió con la portada, reubicada en el nuevo muro de mediodía.


Está formada por tres arquivoltas biseladas, que se apoyan en impostas decoradas, muy erosionadas. Rodea el conjunto un guardapolvo ajedrezado.


La arquivolta central se apoya en dos columnas con los capiteles esculpidos. El del lado izquierdo tiene esculpidos motivos vegetales y dos aves, mientras que el de la derecha es únicamente vegetal. El ábaco también está decorado, en este caso con motivos florales.


El tímpano tiene esculpido un crismón trinitario, flanqueado por dos palmetas. Tras la Guerra Civil, se colocó sobre ella un lápida en memoria de los caídos del bando nacional. Para acomodar la se estropeó parte del tímpano.


También se trasladaron los canecillos esculpidos en que se apoya el tejado. Algunos de ellos estaban historiados y otros presentan motivos geométricos. Desgraciadamente su grado de erosión se bastante elevado. También estaba decorada la cornisa con motivos florales, pero la erosión también ha eliminado la mayoría de motivos esculpidos.


La cabecera románica se derribó, para construir un atrio, que es el actual acceso al templo.


Si que se conservó el presbiterio, sobre el que se levantó una torre campanario.


En el Museo Diocesano de Jaca, se conservan dos capiteles, que servían de soporte para un retablo, situado en la cabecera de la nave sur. Su tamaño es menos detallada que los de la portada, lo que nos hace pensar que fueron obra de otro maestro. Se desconoce cuál era su ubicación original. Incluso se especula con la posibilidad  que sean de otro templo y fueran llevados a Arbués para evitar su expolio.